Vaciar recipientes que puedan acumular agua, emplear telas mosquiteras en ventanas, ponerse ropa que cubra la piel y el uso de repelentes, entre las recomendaciones para hacer frente a los mosquitos transmisores del virus del Nilo

Se cumple una semana del inicio de los trabajos para la implantación del Plan Municipal de Vigilancia y Control de Mosquitos Transmisores de esta enfermedad, coincidiendo con la declaración de nivel de riesgo 4 por parte de la Junta de Andalucía en nuestro municipio. Ante esta situación, el Ayuntamiento informa de algunas pautas preventivas a tal efecto.

La Junta de Andalucía declaraba hace una semana con nivel de riesgo 4 al término municipal de Antequera respecto al riesgo de mosquitos transmisores del virus del Nilo tras detectarse un caso de infección en un ejemplar de caballo. Ante esta situación, el Ayuntamiento inició los trabajos para la implantación de un Plan Municipal de Vigilancia y Control de estos tipos de mosquitos transmisores de la enfermedad.

Paralelamente, el Consistorio hace extensivas y concretas a la población en general algunas pautas y recomendaciones de carácter preventivo con un doble objetivo: tratar de erradicar los posibles focos y, además, prevenir las picaduras de estos mosquitos.

El alcalde de Antequera, Manolo Barón, lanza un mensaje de "tranquilidad" a la población, instando a seguir los consejos y recomendaciones que desde la Delegación Territorial de la Consejería de Salud ofrecen, insistiendo además que la época de mayor reproducción de los mosquitos está acabando ya en el mes de octubre.

En el hogar hay que tener en cuenta que los mosquitos que pican, como tónica general a cualquier tipo de ellos transmisores o no, se han críado cerca del lugar. Las fases juveniles de los mosquitos transmisores se desarrollan en aguas estancadas, no necesitando mucho espacio. Como ejemplos podrían mencionarse cubos, latas, depósitos, fosas sépticas mal tapadas, fuentes y, sobre todo, piscinas no tratadas ni cloradas fuera de la temporada de baño.

En el caso de disponer de jardines, la abundante vegetación y el riego regular también supone un lugar idóneo para albergar a mosquitos adultos. En cuanto al campo, las cercanías de zonas con agua estancada son los lugares que suelen frecuentar más los mosquitos, sobre todo en las horas de salida y puesta de sol.

Como medidas preventivas para el control de la cría, se recomienda no guardar en el domicilio recipientes (macetas o cubos) que puedan acumular agua, vacíandolos al menos una vez a la semana en el caso de que resulten imprescindibles. Si no es posible evitar el vaciado o protección, como es el caso de estanques, piscinas o fuentes, se recomienda la cloración del agua o la introducción de peces. En el caso de explotaciones ganaderas, se debe evitar en la medida de lo posible agua de charcos en rodadas de vehículos o caminos, fugas de agua por grifos o bebederos con fugas. 

 

Cómo evitar las picaduras

Son varias las recomendaciones para evitar las picaduras de cualquier tipo de mosquito, en este caso el transmisor del virus del Nilo. En primer lugar, el uso de telas mosquiteras en ventanas y puertas, vigilando cuartos de bombas con depósitos de agua. 

Se aconseja el uso de ropa que cubra la piel (manga larga, pantalones largos y calcetines), así como dejar las luces apagadas si las ventanas están abiertas puesto que los mosquitos acuden a la luz. También se pueden usar repelentes para mosquitos, siempre que estén registrados "para uso doméstico" al igual que en el caso de insecticidas de aerosoles, debiéndose en estos casos airear bien las habitaciones.